viernes, 10 de febrero de 2006

"Listas negras" en el correo electrónico

El glosario de términos de la fauna y flora que puebla internet puede engrosarse con uno nuevo: BL, Black List o lista negra.
Se trata de un invento bastante reciente a lo que yo sé, que designa un conjunto de direcciones de correo secuestradas por cualquier causa –generalmente con la excusa de propagar spam-; conjunto del que se puede salir – y aquí viene la maldita gracia del tema- previo pago de una cantidad de dinero al James Bond de pacotilla.

Yo llevaba ya unos meses notando irregularidades en mi cuenta de correo: a veces había interrupciones en los mensajes de las listas de Yahoo a las que estoy subscrito, de temática bien inocente y desde luego nada insustancial, todo lo contrario al spam. Y además, algunos mensajes particulares que tampoco me llegaban, diciéndome los emisores de los mismos que habían recibido el correspondiente aviso de devolución.
Como la cuenta de correo a la que me refiero funcionaba en un 80 o 90% ya me iba acostumbrando a llegar a mi cuenta de Yahoo y restablecer el envío de correo; pero es esta una operación que cuando debes repetirla varias veces por semana te cansa, amén de que dejas de leer determinados correos que pueden ser bien interesantes. De forma que te dices: “¿no sería bueno hacer caso de esos mensajes de devolución que nunca tenemos en cuenta, por si arrojan luz sobre lo que está pasando?
Un buen amigo me hizo llegar el mensaje de turno, avisado por mí de la situación. Y entonces descubrimos el pastel. Transcribo lo más transcribible del mismo para no incurrir en publicidad de operadores ni desvelar direcciones:

Subject: Mail delivery failed: returning message to sender
> This message was created automatically by mail delivery software.

> A message that you sent could not be delivered to one or more of its
> recipients. This is a permanent error. The following address(es) failed:

(vienen ahora el nombre de la cuenta y el del host que omito y después el interesante diagnóstico y el nombre del malaventurado doctor o cirujano):

> 62.36.20.205 is in a blacklist at spam.dnsbl.sorbs.net.
> 550)

(Y ahora lo mejor: el link para curarse, siempre que uno esté dispuesto a pagar 50€, claro):


…………..

Lo siguiente ya se puede suponer. Pinchar en el link a ver qué se puede hacer para remediar la situación, incluso con la esperanza de llegar a un lugar de la red donde reinan la justicia y las cosas bien hechas. Pero en seguida descubres que sigues siendo ingenuo quasi imbécil:
“le hemos capturado su IP para que usted no perturbe: somos así de buenos, de eficaces, de precabidos. Suéltenos 50€ y será nuevamente libre”.

No está mal pensado el negocio, hasta las comunicaciones por e-mail deben pagar ahora canon a custodios de la limpieza.

Pero el tema puede retorcerse más. En:



Podemos descargarnos un flamante monitor de listas negras por 67 dólares: desde luego, los hay que están en todo y no escatiman esfuerzos por la comunidad.

martes, 7 de febrero de 2006

Programa genial para partir archivos mp3

mp3DirectCut
Programa genial para partir mp3

!!estamos de enhorabuena!: sí, con lo mal que a veces lo tenemos quienes hemos de trabajar con jaws, por no ver para nada la pantalla del PC; claro, no va
a ser por gusto, que a tanto no llega nuestra veneración por el invento de Freedom:

y estamos de enhorabuena porque, siendo así que es una lata el encontrarnos con mp3 bajados con la mulita de una extensión respetable, tanto que la gente
mete en ellos un CD enterito, pues ahora podemos partirlos por sus tracks sin grandes problemas:

el programa además hace algunas cosas más, como normalizar, trocear con cue, o grabar; pero partir es muy fácil: y es accesible, pesando sólo menos de 200
Ks:

esta es la dirección, que estaréis hartos de mi rollo y deseosos de trastearlo:



Bueno, lo mejor es que vosotrosmismos ensayéis; lo cierto es que cargado el archivo puede en la columna de edición del menú, pulsarse sobre detectar silencios
y entonces el programa lista todos los posibles tracks, que pueden encontrarse por el menú en la opción lista:

y luego pueden salvarse en la opción "guardar trozo".

Si hemos preparado una nueva carpeta con el nombre del CD ya podremos enviarle estos archivos resultantes y borrar el antiguo mp3 extenso e inmanejable:

que lo disfrutéis.

sábado, 4 de febrero de 2006

Las imágenes de validacion, otra barrera para los deficientes visuales

Es increíble, y a veces no damos a vasto: ¡varias instituciones intentando preservar los niveles de accesibilidad de la red de redes para los deficientes visuales! Y muchas veces nos perdemos en disquisiciones vizantinas, en pormenores no muy significativos, en reglamentaciones intrincadas, diseñando sistemas automáticos de baremación…
Y a veces se nos escapa insistir en cosas centrales.
Lo que aquí quiero subrallar es el problema de esas imágenes que nos piden que copiemos cada vez para más acciones: abrir una cuenta de correo, solicitar un espacio para una web, darnos de alta en determinados servicios…
Se trata de una imagen que los lectores de pantalla para ciegos no deletrean, con la que los operadores y las empresas en general que las usan pretenden que las máquinas no automaticen el proceso de subscripción, con el riesgo de infringir errores o multiplicar usuarios irreales e incluso poder colapsar los servicios.
Es verdad que hay recursos malintencionados de este tipo por doquier, pero también es bueno que cuando se piensen soluciones se piensen para todos; o al menos sería muy deseable que aunque esas soluciones no se piensen para todos, nuestros colectivos tuvieran más rapidez de actuación y pudieran realmente llegar a los diseñadores de estas webs.
Es cierto que algo se va avanzando, pero este asunto lleva ya años en la red y no he escuchado ni leído que se esté reaccionando sobre el particular, aunque es verdad que sí ha habido algunas búsquedas de alternativas, como la de introducir un archivo mp3 para que la persona ciega teclee tras oír, o la recomendación de enviar por correo la circunstancia de que somos ciegos y que queremos acceder al servicio vedado mediante otro prcedimiento distinto al de la imagen, pero en esta opción, pues claro, podemos morirnos esperando…
Diré algo curioso: se me ocurrió comentar a alguien bien entendido en todos los problemas tiflotécnicos qué pasaría si los lectores fueran implementando un OCR para reconocer las letras exhibidas en las imágenes: su respuesta me dejó helado: por aquí estaba la vía de la solución, pero lo peor es que en muchos casos –me dijo- esas imágenes contienen trazos ya pensados para burlar cualquier reconocimiento digital, como por ejemplo, grafías hechas a mano, caracteres no de imprenta, ante los cuales los reconocedores electrónicos nada tienen que hacer. O son directamente dibujos de objetos: (una casa, un árbol) que el aspirante al servicio debe plasmar en el recuadro correspondiente.
De todas formas, hoy no me quise quedar con la gana de ver si había otro camino: como, por ejemplo, imprimir la página que exhibe el dibujo y luego leer el resultado con el optakon (un aparato que lamentablemente ya no se fabrica, que traslada a relieve la información que rastreamos con una camarita generalmente sobre libros). Y cuál fue mi alegría al comprobar que detectaba el código que LYCOS (en http://www.tripod.lycos.es/signup/) me solicitaba mediante la correspondiente imagen (era en esa tirada “2642”). Se trataba de una página de solicitud de espacio en su hostin gratuíto.
El tema es que era un ejemplo de sencillo código que incluso hubiera pillado un OCR; aunque el optakon podría permitir indagar en algunos dibujos y algunas grafías distorsionadas a posta más complejas.
Esto me prueba: 1, la conveniencia de que nuestros lectores sean implementados con más, vamos a decir, plug-ins; 2, la necesidad de repensar los accesos a imágenes en forma análoga y usando el tacto:
El optakon era un buen chisme y también lo serían instrumentos basados en una filosofía parecida, que nos trasladaran las formas más relevantes de los monitores de los usuarios videntes.